El Nazareno no pudo salir tras un largo día de lluvia

La tradicional celebración de la Eucaristía en el templo parroquial de Santa Ana tenía lugar mientras el cielo seguía abierto, después de toda una tarde de lluvias. Con el final de la misa quedó constituido el monumento eucarístico del templo, bellamente adornado con flores y velas que enmarcan el sagrario, obra culmen de la orfebrería que atesora el patrimonio frexnense.

Desde ahí los feligreses iniciaban la visita a los sagrarios sin paraguas rumbo al convento de la Paz, donde las Madres Agustinas habían preparado bellamente su monumento, con un lienzo dedicado a la Última Cena y bellos candelabros que ponían el broche a la presentación. De vuelta en la Corredera, camino de Santa María empezaban a caer las primeras gotas, llegando al templo mayor con paraguas abiertos. En el interior de la capilla del Rosario, el bello monumento destaca siempre por su baldaquín de plata y espejuelos que hacen brillar la luz que rebota sobre él. La lluvia que se había introducido en la capilla por la cúpula que remata el espacio, permitía igualmente reflejar sobre el suelo todo el conjunto, creando una imagen novedosa para este lugar.

El último tramo hasta Santa Catalina, de nuevo, paraguas abiertos. En el interior nos esperaba la Virgen de la Salud vestida con el duelo morado de Cuaresma, que completa bellamente el conjunto elaborado por las vecinas del barrio, con exorno florar y un pañuelo que refleja el rostro de Cristo, como el de la Verónica. Completada así la primera etapa de este Jueves Santo, tocaba volver bajo la lluvia hasta Santa Ana, mientras las precipitaciones se intensificaban marcando el destino de la procesión que no podría salir.

De vuelta en el corazón del barrio santanero, los penitentes de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima del Mayor Dolor habían formado en dos líneas en el centro del templo, junto a los titulares de su cofradía. Dadas las condiciones meteorológicas se optó por realizar un momento de oración junto a las imágenes de Jesús Nazareno y María del Mayor Dolor. Tras la lectura de distintas estaciones del Vía Crucis, la Asociación Músico Cultural de Fregenal de la Sierra interpretaba distintas marchas procesionales.

En el centro del templo, los frexnenses miraban en silencio el pasear por la iglesia de ambos pasos, que giraron para estar enfrentados. El capataz del paso de palio quiso dedicar la levantá a los enfermos, y especialmente a los enfermos de alzhéimer y cáncer, con un sentido homenaje a uno de sus hermanos que no pudo acompañarles en la estación de penitencia. María del Mayor Dolor miraba al pueblo al son de la marcha «Siempre la Esperanza», mientras el solo de saxofón profundizaba en el ambiente de recogimiento y oración.

VIERNES SANTO

El Viernes Santo se iniciará a las doce y media en el templo parroquial de Santa Catalina con el Sermón de las Siete Palabras. Se espera que a la una, como es tradicional, salga en procesión la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón y Nuestra Señora de las Angustias, desde el mismo templo. A las seis de la tarde, se celebrarán los Santos Oficios en el convento de las Madres Agustinas, y a las ocho de la tarde se iniciarán los Oficios Solemnes en el Templo Parroquial de Santa Catalina. Finalmente, se espera la salida de la procesión de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, desde el templo parroquial de Santa María, a partir de las once de la noche. A la hora del cierre de esta información, la Agencia Estatal de Meteorología ofrecía un parte favorable a las salidas procesionales, sin predicción de lluvia para las horas en las que tienen lugar las estaciones de penitencia previstas para el Viernes Santo.