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Diego muestra la hoja de su peculiar planta.
Un ejemplar exótico llegado de otras tierras

Un ejemplar exótico llegado de otras tierras

Diego Delgado nos muestra una pestosa aunque a la vez hermosa Dragontea con propiedades medicinales

juan ignacio márquez

Martes, 23 de agosto 2016, 22:17

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Aunque no está muy clara su procedencia, lo cierto es que Diego Delgado la trajo a Fregenal de la Sierra hace varias décadas al regresar de uno de sus múltiples viajes.

Aquí lleva ya un montón de años, lo menos treinta, nos dice, aún vivía mi madre cuando la traje. De ella sembré en el huerto una sola batata, porque la vi y me gustó y con el tiempo fue corriendo por todo el patio, sin duda es un ejemplar muy singular,

Ya hace algún tiempo que Diego nos habló de ella y lo cierto es que se siente orgulloso de contar en su jardín con una especie tan rara y exótica: Un primo mío de la localidad sevillana de Gerena me puso al día a través de un amigo suyo sobre la importancia de esta planta con notables propiedades medicinales, según me dijeron, aunque a la vez peligrosa.

Diego, nos la mostraba en el huerto de su casa en la calle Sevilla, y ciertamente aparece como una planta especialmente llamativa por la forma de su tronco, sus extrañas hojas y sobre todo el hermoso color morado de la flor que ofrece cada primavera.

Tal y como le hizo saber, hace bastantes años, el Catedrático de Ciencias y Recursos Agrícolas y Forestales de la Universidad de Córdoba y Director del Jardín Botánico de la capital de la Mezquita entre 1980 y 2008, Jacinto Esteban Hernández Bermejo: Casi sin ningún tipo de duda, se trata de una especie de la familia de las Aráceas, científicamente llamada Dracunculus vulgaris, más vulgarmente conocida en España como Dragontea mayor.

Se trata de una especie originaria de la región Este y Centro Mediterránea no autóctona en España aunque se conoce de poblaciones silvestres, probablemente naturalizadas. La especie ha sido utilizada como medicinal en épocas pasadas.

Al tiempo que le facilitaban esta información, le solicitaban a la familia Delgado un ejemplar de ella desde el Jardín Botánico de Córdoba, teniendo en cuenta que se trataba de una planta realmente rara en España y por sus virtudes medicinales y significado histórico. Además, como les indicaban, a esa fecha no se contaba con ninguna especie de estas características allí.

La curiosidad de Diego hizo también que cayesen en sus manos fragmentos de otras publicaciones que se referían al modo en que Hipócrates llamó a la Dragontea Ophis, que quiere decir serpiente, motivo por el que quizá los herbolarios la llamaron serpentea, porque su tallo parece vestido del despojo de alguna culebra.

El propio Diego Delgado afirma que: Su tronco es una de las partes más hermosas de esta planta porque, ciertamente, parece la piel de una serpiente. Esto fue lo primero que me llamó a mí la atención, luego, tras reverdecer en primavera ofrece una flor de color morado preciosa.

No obstante también tiene sus cosas, al margen de tener propiedades medicinales, se considera, igualmente, una planta abortiva y alucinógena, es venenosa y por ello ha de tenerse lejos del alcance de los niños.

Lo cierto, culminó, es que donde la tenemos, no se ve ni una mosca, ni un mosquito, mosca que se posa se cierra y se la traga, se lo come todo. Evidentemente no es una planta nada común, no es de las que te encuentras por ahí es muy rara y especialmente exótica, aunque un poco pestosa, como decía mi madre.

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